El elefante encadenado

Hoy te traigo un cuento de Jorge Bucay. Para mí este hombre es toda una fuente de inspiración desde hace años. No sé en qué momento llegó a mis manos este cuento, pero lo utilizo siempre que imparto algún curso de formación sobre Coaching porque me parece muy gráfico para hablar de creencias.

Te dejo el enlace a Youtube si prefieres escucharlo de la propia voz de su autor, y te lo dejo escrito aquí, por si prefieres leerlo.

Como decía, este cuento nos permite reflexionar sobre esas creencias que se han arraigado en nuestro pensamiento, bien porque de pequeños nos lo repetían nuestros padres o profesores ("no hagas eso, que no está bien", "eso no se te da bien", "eso es de ricos", "eso es de pobres", "eso no es un trabajo", "de eso no vas a vivir"...), bien porque lo aprendimos en nuestro entorno (nadie de mi familia esquió nunca, y yo durante mucho tiempo asumí que no esquiaría nunca), bien porque nos lo decíamos a nosotros mismos. 

El caso es que no es extraño que existan cosas que nos gustaría hacer, que nos da pena no hacer, que no nos atrevemos a probar..., simplemente porque en el pasado no pudimos hacerlas. Y no nos damos la oportunidad de intentarlo de nuevo, porque estamos aferrados a la idea del "no puedo". Como dice Jorge en el cuento "vivimos pensando que no podemos hacer montones de cosas, simplemente porque una vez, hace tiempo, cuando éramos pequeños lo intentamos y no lo conseguimos".

"Vivimos pensando que no podemos hacer montones de cosas, porque cuando eramos pequeños no lo conseguimos
Foto: Regina Estévez

Y ser pequeño no significa solo ser un niño. Ser pequeño puede significar no tener la experiencia que tenemos ahora. Porque cada día que pasa somos diferentes del día anterior. Una conversación, un error, un éxito, un libro... son tantas cosas las que pueden cambiarnos y hacernos crecer...

Por eso te invito a que pienses qué cosas tienes ahí guardadas, para las que has asumido que no puedes... qué estacas te están impidiendo darte una nueva oportunidad... Y que la próxima vez que pienses "no puedo", te permitas analizar un poco más profundamente si hay algo del pasado que te lleva a decir eso... Quizás descubras que ahora sí puedes.

Espero que te haya hecho pensar, cuídate mucho y recuerda ser feliz!!

Comentarios

Entradas populares de este blog

Nadie dijo que fuera fácil

El año que se termina

La ignorancia es muy atrevida