Serendipity
¿Has oído hablar de la Serendipia (Serendipity en inglés)?
Yo oí hablar hace unos años a Guzmán López en una formación en la empresa sobre creatividad en los negocios. Esta semana, de nuevo, tuve la oportunidad de escucharle hablar sobre este concepto y me ha hecho reflexionar sobre ello.
Guzmán es psicólogo, y se define como explorador de ideas creativas. Tiene varios libros escritos, uno de ellos con el título "Serendipity", y ahora está haciendo su tesis doctoral sobre este concepto.
Si no sabes qué es la serendipia, a estas alturas de la lectura ya estarás deseando saberlo, verdad?
He buscado en la rae, y al parecer es un término de reciente incorporación al diccionario. La definición que aparece es: "hallazgo valioso que se produce de manera accidental o casual".
Algunos ejemplos de serendipia son el descubrimiento de la penicilina, o el post-t.
Aquí te cuento algunos de los contextos en los que puede haber serendipia:
Cuando estamos intentando llegar a un objetivo, y el resultado que obtenemos no es el esperado. A priori podemos pensar que es un fracaso, pero analizando ese error y viéndolo desde otras perspectivas puede convertirse en un éxito. Este es el caso del post-it, a partir de un pegamento endeble que se encontraron al intentar fabricar uno más fuerte, podía haberse quedado en un fracaso, desecharlo y seguir trabajando en el objetivo inicial. Sin embargo, el hecho de que alguien conectase ese nuevo resultado con otra situación permitió darle una oportunidad, que acabó convirtiéndose en un éxito.
Otra situación puede ser cuando aparece algo inesperado. Ante esto podemos ignorarlo, o intentar evitarlo, o tratar de superarlo. O, lo que nos llevaría a la serendipia, que es intentar ver qué podemos hacer con ello, cómo podemos verlo desde otra perspectiva... Es el caso de Flemming en su descubrimiento de la penicilina, que surgió del hecho de que apareció moho en un cultivo que había dejado un tiempo en el laboratorio.
¿Y cómo podemos aprovecharnos de esto de la serendipia en nuestra vida? Pues yo pensaba estos días en ello y ya he podido ponerlo en práctica.
Cuando surja un imprevisto que no me gusta, un cambio de planes, un problema aparente, intento abrir la mente para pensar qué podría traer de positivo ese imprevisto. Es clave esa apertura de mente, el tener quizás algo de fe en que algo bueno puede llegar. Que igual no, pero si intentamos buscarlo, es más fácil que aparezca...
Te pongo un ejemplo que me ha pasado esta semana. El otro día tenía reunión en el cole de mi hijo a las 17:00 así que a las 16:30 estaba intentando aparcar, cuando veo en la agenda que la reunión era a las 17:30. Lo primero que pensé fue, "madre mía, con la de cosas que tengo que hacer y voy a estar una hora aquí haciendo nada". Pero intenté aplicar esta nueva manera de pensar y hacerme la pregunta "¿qué es lo mejor que puedo hacer con esto que me ha pasado?" y surgieron idea:. Llamé a una amiga con la que hacía tiempo quería hablar y nunca encuentro el momento y gestioné una cita médica.
Al final, gracias a haber llegado antes, pude hacer cosas para las que no había encontrado tiempo.
Cuántas veces nos frustramos porque no nos salen las cosas como esperamos, porque aparecen dificultades en el camino o porque otros toman decisiones que nos afectan. Me gusta el concepto de serendipia porque le da otro sentido a esas situaciones. Porque de algún modo hace que tengamos más esperanza.
Tenemos que aprender a manejar lo inesperado. Verlo como una alternativa más. Darle una oportunidad e intentar ver qué de bueno puede venir en esa situación.
Yo estoy trabajando en esta nueva manera de pensar. Y tú, te animas a probarlo? Espero que sí.
Sólo una cosa más... No lo olvides. Sé feliz!!
Algunos ejemplos de serendipia son el descubrimiento de la penicilina, o el post-t.
Aquí te cuento algunos de los contextos en los que puede haber serendipia:
Cuando estamos intentando llegar a un objetivo, y el resultado que obtenemos no es el esperado. A priori podemos pensar que es un fracaso, pero analizando ese error y viéndolo desde otras perspectivas puede convertirse en un éxito. Este es el caso del post-it, a partir de un pegamento endeble que se encontraron al intentar fabricar uno más fuerte, podía haberse quedado en un fracaso, desecharlo y seguir trabajando en el objetivo inicial. Sin embargo, el hecho de que alguien conectase ese nuevo resultado con otra situación permitió darle una oportunidad, que acabó convirtiéndose en un éxito.
Otra situación puede ser cuando aparece algo inesperado. Ante esto podemos ignorarlo, o intentar evitarlo, o tratar de superarlo. O, lo que nos llevaría a la serendipia, que es intentar ver qué podemos hacer con ello, cómo podemos verlo desde otra perspectiva... Es el caso de Flemming en su descubrimiento de la penicilina, que surgió del hecho de que apareció moho en un cultivo que había dejado un tiempo en el laboratorio.
¿Y cómo podemos aprovecharnos de esto de la serendipia en nuestra vida? Pues yo pensaba estos días en ello y ya he podido ponerlo en práctica.
Cuando surja un imprevisto que no me gusta, un cambio de planes, un problema aparente, intento abrir la mente para pensar qué podría traer de positivo ese imprevisto. Es clave esa apertura de mente, el tener quizás algo de fe en que algo bueno puede llegar. Que igual no, pero si intentamos buscarlo, es más fácil que aparezca...
Te pongo un ejemplo que me ha pasado esta semana. El otro día tenía reunión en el cole de mi hijo a las 17:00 así que a las 16:30 estaba intentando aparcar, cuando veo en la agenda que la reunión era a las 17:30. Lo primero que pensé fue, "madre mía, con la de cosas que tengo que hacer y voy a estar una hora aquí haciendo nada". Pero intenté aplicar esta nueva manera de pensar y hacerme la pregunta "¿qué es lo mejor que puedo hacer con esto que me ha pasado?" y surgieron idea:. Llamé a una amiga con la que hacía tiempo quería hablar y nunca encuentro el momento y gestioné una cita médica.
Al final, gracias a haber llegado antes, pude hacer cosas para las que no había encontrado tiempo.
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| Foto: Regina Estévez |
Cuántas veces nos frustramos porque no nos salen las cosas como esperamos, porque aparecen dificultades en el camino o porque otros toman decisiones que nos afectan. Me gusta el concepto de serendipia porque le da otro sentido a esas situaciones. Porque de algún modo hace que tengamos más esperanza.
Tenemos que aprender a manejar lo inesperado. Verlo como una alternativa más. Darle una oportunidad e intentar ver qué de bueno puede venir en esa situación.
Yo estoy trabajando en esta nueva manera de pensar. Y tú, te animas a probarlo? Espero que sí.
Sólo una cosa más... No lo olvides. Sé feliz!!
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